domingo, 28 de septiembre de 2014

Wakeboard, materiales y más

El wakeboard se ha erigido sin duda como una de nuestras actividades estrella, dentro de la gama de opciones que ofrecemos en el embalse de La Sotonera.

Hoy os contamos un poco sobre los materiales necesarios para su práctica...

Por supuesto está la tabla de wake. Hay diferencias entre ellas, referidas por ejemplo al nivel de experiencia del rider o al peso y tamaño del mismo.


El peso es un factor fundamental a la hora de elegir una tabla. Mientras más pesado sea el rider, más larga será la tabla. Aunque los riders más expertos eligen tablas más cortas independientemente de esto. El hecho de ser más cortas las hace más agresivas y rápidas ofreciendo mayor facilidad para realizar trucos y maniobras de mayor complejidad, así como giros más rápidos.

Como otro tipo de tablas, las de wakeboard poseen camber, es decir una leve curvatura desde el centro hacia las puntas.
Las tablas para principiantessuelen ser más planas. Esto propicia poder deslizarse con más suavidad y también ayuda a girar con más facilidad.
Luego están las que poseen el llamado rocker (camber invertido). Estas son especialmente buenas para giros bruscos en aguas tranquilas.
También las hay las que tienen los rocker de tres etapas. Tienen la parte central plana y la curva se exagera mucho en los dos bordes de la tabla. Con ellas se consigue un salto más alto al golpear la estela de agua. De todos modos una tabla con más rocker no implica que sea mejor ya que se pierde contacto con el agua y tiende a patinar más.



Las tablas pueden llevar (o no) también aletas. Las aletas son la junta que interactúa con el agua. Su forma y tamaño influyen en cómo se comportará la tabla cuando estés sobre ella.
Las aletas más pequeñas y delgadas van mejor para aguas tranquilas mientras que las anchas y más profundas aumentan la estabilidad en condiciones de agua más dificultosas.








Por otro lado las botas de wake. Las botas las encontramos en dos vertientes: bota cerrada de tallas únicas y bota abierta flexible y muy adaptable, que permite ajustarse a un amplio rango de tallas.

La bota cerrada es adecuada para un rider con un nivel ya avanzado. Ofrece una excelente fijación del pie y el talón que aumentan la confianza y la seguridad. Este tipo de bota transmite directamente la fuerza y energía del rider sobre la tabla, consiguiendo así mejor precisión en los movimientos. Garantizan un wakeboard más reactivo y unas recepciones más controladas aunque su principal inconveniente viene a ser su talla única, que limita el producto al uso casi exclusivo de una única persona.


La bota clásica abierta está indicada para aquellos que se están iniciando al deporte o tengan intención de compartir la tabla. La principal ventaja de este tipo de bota es su capacidad para adaptase a las distintas tallas y pies. Encontraremos modelos más rígidos que ofrecen una mejor fijación del pié y el talón o modelos algo más flexibles para adaptarse a un rango mayor de tallas.





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